Cuando entre en vigor la Resolución del Consejo Colegiado (RDC) No. 429, de 8 de octubre de 2020, de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), se producirá un cambio significativo en el empaque de la mayoría de los alimentos listos para consumir. Específicamente prevé el etiquetado nutricional de los alimentos envasados (Fuente).
La Comisión ha autorizado cinco cultivos modificados genéticamente (3 de maíz y 2 de soja) y ha renovado la autorización de tres cultivos de maíz utilizados para alimentos y piensos. Todos estos OMG han pasado por un procedimiento de autorización exhaustivo y estricto, que incluye una evaluación científica favorable de la EFSA. Las decisiones de autorización no cubren el cultivo. Las autorizaciones tienen una validez de 10 años y cualquier producto producido a partir de estos OMG estará sujeto a las estrictas normas de etiquetado y trazabilidad de la UE. (Fuente).
La Federación de Sindicatos de Productores Agrícolas se opone a la propuesta de la Comisión Europea de un nuevo sistema de etiquetado nutricional en la parte frontal de los envases de alimentos. Según FBZPR, tal sistema será injusto para los productores y engañará a los consumidores (Fuente).
Se espera que los vinos vendidos en Europa requieran etiquetas con información calórica, así como cualquier aditivo (como ácido tartárico o agua) para 2022 (Fuente).
La Organización de Consumidores y Usuarios (Odecu): En general, los análisis realizados mostraron que «la mayoría de los yogures cumple con lo que declara en su etiquetado nutricional y, además contienen el potencial probiótico de Lactobacillus Bulgaricus y Streptococcus Thermophilus, que es lo que finalmente les otorga la definición de producto: yogur», sostuvo (Fuente).
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